Amenazan con demandar a docentes por hacer cumplir el protocolo sanitario

Un grupo de padres se organizó para accionar legalmente en contra de docentes que restringen el ingreso de alumnos sin barbijo a las escuelas, medida que fue adoptada a fin de prevenir la circulación de la pandemia.

En diálogo con LaCienPuntoUno, Hugo Fernández, uno de los padres, indicó: “Tenemos algunos casos de escuelas. Cinco en concreto, uno 172, dos de la 211, una 743 y jardín 413, en donde  las autoridades no permiten el ingreso de alumnos si no tienen barbijo”.

“Tenemos todo preparado para hacer las denuncias penales en contra de esos docentes. Porque no le pueden negar el derecho a la educación”, resaltó.

“Siempre que se hablo de barbijo, se habló de recomendación. Los protocolos son recomendaciones no obligación. Eso es algo que dijo el propio Ministerio de Educación cada vez que se les ha preguntado”, sostuvo al tiempo que insistió: “Los docentes que les niegan el acceso por ese motivo están excediendo su función. Ningún docente está habilitado de prohibir el acceso a un alumno. Violan la ley de educación. Tienen la obligación de tratar a todos sus alumnos por igual sin discriminación”.

Este grupo de padres asegura que “Hay cientos de estudios científicos que demuestran que el uso del barbijo es perjudicial y principalmente para los chicos, que son los que más oxígeno necesitan porque están  en desarrollo”.

Cabe destacar que el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) – organismo académico que promueve la investigación científica y tecnológica en el país- asegura  que los barbijos, tapabocas o mascarillas están diseñados para dejar pasar moléculas tan pequeñas como el oxígeno y el dióxido de carbono, y sirven como barrera para moléculas más grandes o partículas virales. Por esto, no es posible que el dióxido de carbono que se exhale se quede dentro del barbijo y provoque mareos o daños.

Ni la OMS ni la CDC advierten sobre la falta de oxígeno (hipoxia) con el uso prolongado de máscaras faciales. A su vez, el uso de mascarillas no tiene ningún efecto negativo sobre el funcionamiento del cerebro o el corazón. Tampoco existe ninguna evidencia científica que confirme una alteración en la respuesta del sistema de defensas (sistema inmune) del individuo que la utiliza. Es importante recordar que los niños también pueden infectarse, enfermarse y contagiar el virus a otras personas.