Corrientes: Encuentran a un gendarme muerto con un tiro en la cabeza y medias en la boca
Lo encontró la esposa, quien también trabaja en Gendarmería Nacional.
jueves, 23 de junio de 2022 - 12:33
Un sargento de Gendarmería Nacional de 37 años fue encontrado asesinado de un disparo en la cabeza, con dos medias en la boca y una cinta aisladora alrededor del cuello. El macabro hallazgo sucedió en su casa de Santo Tomé, en Corrientes.
Se trata del efectivo Alfredo Vivero que trabajaba en el Escuadrón 57 de esa fuerza de seguridad federal. Si bien el caso se dio a conocer en la mañana de este miércoles, su cuerpo fue encontrado el martes por su esposa, también gendarme.
En la escena del crimen descubrieron el celular de la víctima quemado adentro de una olla. Se entrevistaron a varias personas, se tomaron huellas, se analizaron cámaras de seguridad adyacentes y están averiguando relaciones.
Además, se supo que el hecho se registró el martes pasadas las 14 en el domicilio del gendarme.
En un principio se creyó que podría tratarse de un suicidio, debido a que al momento del hallazgo el gendarme tenía su arma reglamentaria en la mano, pero las tareas del médico forense y de los peritos llevaron a la pista de un crimen.
“No tenemos ninguna duda de que se trata de un homicidio”, remarcó el fiscal Facundo Cabral, quien no precisó si la pistola de la cual partió el disparo que mató a Vivero partió de ese arma que le encontraron o de otra.
De acuerdo a los resultados preliminares de la autopsia, el efectivo de Gendarmería murió por el disparo que recibió en la cabeza. Asimismo, Cabral estableció que la víctima tenía “dos medias adentro de la boca y una cinta aisladora en el cuello, que no le provocó ahorcamiento”.
Con respecto de los peritajes, el fiscal detalló que ahora se está profundizando la pesquisa en las relaciones que Vivero mantenía con diversas personas. Se realizaron pericias en su auto y se secuestró su notebook.
Según publicó TN Noticias, el cuerpo del sargento Vivero fue hallado con el tronco sobre la cama, con las extremidades superiores tocando el piso, con un aparente disparo en la sien y el arma reglamentaria cerca de su mano derecha.
