Lo dijo Vicente Albornoz, economista y decano de la Universidad de Quito, que además fue diputado cuando en Ecuador se aprobó la dolarización en una entrevista en “Hasta que se den cuenta” de LaCienPuntoUno.
martes, 31 de octubre de 2023 - 12:28De cara al balotaje del 19 de noviembre, uno de los candidatos propone desde el inicio de su campaña un proyecto que ya ha sido aplicado en otros lugares del mundo, como lo es la dolarización.
Al respecto, Vicente Albornoz, economista y decano de la Universidad de Quito, que además fue diputado cuando en Ecuador se aprobó la dolarización, explicó: “En Ecuador fue un proceso muy rápido. Habíamos tenido un banco central responsable, que rara vez financiaba déficit fiscal, a diferencia de Argentina. Tenía una historia bastante decente. Pero cometió un error, emitió dinero inorgánico ´para pagar a los depositantes de una serie de bancos que quebraron en el año 98 y 99… y eso hizo que perdiéramos confianza en el banco central. Había vientos muy críticos en ese momento y en cuestión un par de meses se tomó la decisión de dolarizar. Lo curioso es que el presidente que dolarizó se cayó 15 días después, pero su sucesor que era su vicepresidente, continuó con el proceso”.
“Aprobamos una ley en cuestión de dos meses y seis meses más tarde estábamos dolarizados, todo esto arrancó el 9 de enero del 2000, y básicamente nueve meses después ya nos habíamos olvidado de nuestra vieja moneda que era el Sucre. Y la economía se estabilizó, la inflación bajó”, explicó y agregó: “Afortunadamente el gobierno de ecuador cuando vio esta crisis bancaria anterior a la dolarización decisión guardar los dólares para después de la tormenta. Una actitud bastante responsable, se guardaron suficientes reservas para dolarizar el país”.
En cuanto a cómo sería un proceso similar en Argentina, dijo: “Es importante ver varias experiencias distintas de dolarización. Tenemos experiencias muy exitosas como Panamá, otras intermedias, como Ecuador o El Salvador y experiencias desastrosas como Zimbabue, y ahí la diferencia entre ellos es la capacidad de ser fiscalmente disciplinados. Es decir tener un gobierno no exagere en el gasto y sobre todo que no gaste recursos que no tiene. En ese caso, yo sé que la comparación que voy a hacer no es muy afortunada, pero Argentina con sus consistentes déficits fiscales financiados por el Banco Central está mucho más cerca de Zimbabue que Panamá”.
“Después de 23 años de ver a mi país dolarizado, me suena muy peligroso que se dolarice Argentina, porque quizás funcione por un tiempo, pero luego las ansias de gasto de algún gobierno, porque algún día volverá un político populista a gobernar Argentina, puede destrozar toda la estructura de una dolarización, como le pasó a Zimbabue”, puntualizó.