Un argentino se fue a vivir a Miami, lo balearon por un dólar y pelea por su vida

Ignacio Gallardo, de 25 años, está en coma porque un hombre le disparó un tiro en el pecho luego que le entregara el dinero.

miércoles, 27 de julio de 2022 - 12:51

Ignacio Gallardo es un argentino de 25 años que se fue a vivir a Miami y se encuentra en muy grave estado de salud después de haber sido baleado por un hombre que le había pedido un dólar.

El hecho ocurrió durante el 21 de julio en la puerta de un edificio, donde Gallardo, un estudiante de arquitectura que residía en Florida desde hacía apenas dos meses, recibió un disparo en el pecho por un desconocido que le había pedido una ayuda monetaria.

Según informó la policía, Gallardo se encontraba junto a un amigo en la puerta del departamento que alquilaba dentro de un edificio en Miami Beach. De acuerdo al relato de su amigo, en un momento se acercó un hombre con rasgos hispanos a pedirles si tenían un dólar para entregarle.

Luego que el joven buscara en su bolsillo y le entregara el billete, el otro hombre sacó de su espalda un arma de fuego y le disparó directamente en el pecho. En ese instante, el atacante salió corriendo y logró fugarse.

“Mi hijo está intubado y sedado, en coma inducido y peleando por su vida”, aseguró Fernando Gallardo, el papá de la víctima. Asimismo, el padre pidió a quienes hayan visto la conferencia que tengan “empatía” con su hijo y que, en la medida de lo posible, puedan aportar los datos necesarios como para dar con el paradero del agresor, publicó Infobae.

La Policía de Miami Beach hizo circular en las redes sociales un dibujo identikit con la silueta del sospechoso: Se trata de un hombre de entre 28 a 32 años con rasgos hispánicos y con un tatuaje en el cuello. También se especificó que este hombre camina con una curvatura en su espalda, como si se tratara de una joroba, tiene pelo negro con reflejos de marrón claro y el tatuaje del cuello posee tribales o símbolos de la cultura china o japonesa.

Además, se indicó que al momento del ataque, el agresor vestía una campera ligera negra con una línea roja en sus mangas y pantalones largos deportivos.

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